Finalmente fue hoy cuando volví a las andadas, a salir de casa cargando aquel estuche. Llegar a un lugar previamente establecido, calentar los dedos. Preparación mental.
Llegada la hora, el nerviosismo inicial que va en aumento... en aumento... en aumento... primera llamada, primera... en aumento... segunda llamada, segunda... en aumento... tercera llamada, comenzamos. No hay marcha atras, la salida es para los cobardes, para los débiles de corazón. ¡No queda sino batirse!
Así pues, me levanto del asiento, tomo la guitarra y subo uno a uno los peldaños de la escalera que me conduce al lugar en donde, por fin, despues de tanto tiempo, he de tocar nuevamente seis cuerdas de nylon. La elocuencia fluye de un modo distinto, muy particular.
La música flota en el aire, el nerviosismo desaparece... la adrenalina fluye, la alegría inunda el lugar... ¡Que alegría me da estar de vuelta! ¡Que bien se ve todo desde arriba!
Muchos días de estos... muchos días de estos.
2 comments:
Hermano... me da tanta alegría por ti, no puedo evitar que los ojos se me rozen de felicidad... "una llama que no se apaga, si no que se enciende con fuerza".. espero que sigas creciendo... en algún momento pense que te alejarías de aquellas andadas, memorables por cierto... pero ahora se que es imposible... aun para mi... despues de tanto tiempo una vocecilla dentro de mi me habla aveces débil... y dejo crecer las alas de mi mano derecha... aunque aveces se que no las volvere a abrir para que la música "flote" como dices...
Solo te discuto el no haberme invitado....FELICIDADES!!!
Trato de escribirte algo pero creo q te lo dij en su momento, esta super bien q regreses a tocar la guitarra de verdad me encantaria q algun dia me degs ver como lo haces. TE KIERO tu sabes cuanto BESOS
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